La atención integral al paciente que ha sufrido un ACV, o lo que comúnmente conocemos como trombosis es una prioridad inquebrantable en Clínica Medilaser. En la sede Centro de Neiva, un equipo de terapeutas ha establecido un proceso robusto y multidisciplinario que comienza desde el ingreso del paciente y se extiende hasta su rehabilitación completa.
Clínica Medilaser ha sido premiada internacionalmente por su atención integral y humanizada a pacientes con trombosis, ataque cerebrovascular (ACV). Este enfoque asegura que cada paciente reciba el apoyo necesario para una recuperación completa y digna. Además del trabajo médico, se destaca la gran labor de las fisioterapeutas.
Magaly Constanza Pérez Montero, fisioterapeuta especializada y coordinadora de Terapia en la sede centro de Neiva, lidera este enfoque. "Desde el momento en que un paciente ingresa, iniciamos una evaluación exhaustiva de su estado neurológico y respiratorio. Este primer paso es crucial para estabilizar al paciente, tratando cualquier falla respiratoria de origen central y garantizando la permeabilidad de las vías aéreas".
Una vez estabilizado, el paciente recibe una valoración fisioterapéutica, fonoaudiológica y ocupacional. Este equipo multidisciplinario trabaja en conjunto para evaluar el desempeño muscular, sensitivo y motor, además de la funcionalidad y las capacidades sociales del paciente.
La terapia física está dirigida a facilitar el desarrollo, mantenimiento y recuperación de la máxima funcionalidad, movilidad del paciente e independencia en sus actividades diarias y desarrollo en el entorno.
La terapia de fonoaudiología o de lenguaje está enfocada en tratar problemas del lenguaje, abarcando el habla, la voz, la comunicación, la audición y deglución. Por su parte, la terapia ocupacional está direccionada a la restauración de la función, supliendo las deficiencias incapacitantes para conseguir la mayor independencia y reinserción posible del individuo en todos sus aspectos: laboral, mental, físico y social.
Innovación
Para lograr estos objetivos, la clínica cuenta con un equipo de terapeutas capacitados y equipados con un Maletín de Terapia que incluye herramientas como balones terapéuticos, tubos elásticos y masajeadores. Además, cada paciente recibe un kit personalizado con materiales como botones, colores, cremalleras y plastilina para mejorar la motricidad fina.
Una gran labor
María Alejandra Naranjo, directora médica de la sede centro de Neiva, destaca que aseguró que la recuperación del ACV es un proceso integral que va más allá del tratamiento médico. Es un compromiso con la vida, la dignidad y el bienestar de cada paciente, asegurando que reciban el mejor cuidado posible en cada etapa de su recuperación.
Clínica Medilaser Centro cuenta con 44 terapeutas, entre ellas la coordinadora de terapias, 2 terapeutas ocupacionales, 2 fonoaudiólogas, 2 rehabilitadoras cardiopulmonar, 16 terapeutas destinadas a los servicios de cuidados intensivos adultos y pediatría y el restante de apoyo para el resto de la institución.
Todas se desempeñan según su perfil o enfoque profesional, y su principal papel es reincorporar al paciente a sus actividades minimizando las limitaciones y secuelas generadas por su condición clínica.
Desafíos
Magaly Pérez aseguró también que lo más satisfactorio en estos pacientes es observar su recuperación progresiva. “Aunque es un proceso largo y extenuante por la cantidad de terapias requeridas, evidenciar resultados que aportan a la independencia e incorporación a la sociedad es gratificante para el personal tratante”.
Concluyó que lo más difícil es la dependencia ante la que los pacientes quedan sometidos. “Muchos deben aprender a caminar, hablar, comer, bañarse, comunicarse y realizar todas sus necesidades desde cero, siendo un verdadero reinicio a la vida, donde la familia es un pilar de gran importancia para la recuperación del paciente.